Consejos para calentar el biberón de forma segura y a la temperatura ideal
A la hora de preparar un biberón, sobre todo cuando se es madre o padre primerizo, es normal que aparezcan dudas: ¿Hay que calentar el biberón siempre? ¿Cuál es la temperatura correcta? ¿Es seguro usar el microondas? Parece sencillo, pero entre métodos, temperaturas y tiempos es normal sentirse un poco perdido. A continuación, te contamos todo lo que debes saber para calentar el biberón de manera segura y evitar riesgos para el bebé.
Cómo calentar el biberón de forma segura
La seguridad empieza antes incluso de encender el fuego o poner agua a calentar. Lo primero es lavarse bien las manos y asegurarse de que la superficie sobre la que se prepara el biberón y los utensilios están limpios o esterilizados. Existen dos formas seguras de preparar la leche: con agua caliente o con agua fría.
Método con agua caliente
Se calienta el agua hasta que empiece a hervir y se vierte en el biberón. Tras esperar tres minutos, la temperatura baja a unos 70 ºC, suficiente para eliminar bacterias que puedan estar presentes en la leche en polvo. Después se añade la leche, se agita y se enfría bajo el grifo hasta que quede templada.
Para garantizar que la leche alcanza la temperatura adecuada sin perder sus propiedades, te recomendamos el Calienta Biberones y Esterilizador de Farline , que ofrece cuatro funcionalidades: calentamiento rápido en 3-7 minutos, calentamiento constante, calentamiento a temperatura deseada y esterilización. Su diseño digital y moderno ofrece una experiencia práctica y sencilla, y además es compatible con los extractores y repuestos de Aposán Maternity y Farline Bebé.
Método con agua fría
Cuando no es posible usar agua caliente (por ejemplo, si el preparado contiene probióticos o estamos fuera de casa) se puede usar agua a 20 ºC o menos. Solo hay que mezclar, agitar y dar la toma inmediatamente. Eso sí: este método no elimina bacterias, por lo que no es adecuado para bebés con mayor riesgo.
En casa o fuera de ella, la clave es la misma: preparar el biberón justo antes de usarlo y desechar cualquier resto que no se tome en un máximo de dos horas. La leche preparada es un caldo perfecto para bacterias, así que mejor no guardarla para más tarde.
Sea cual sea el método que elijas, los nuevos biberones y tetinas de Farline pueden hacer que la experiencia para tu bebé sea mucho mejor, tanto en comodidad como en seguridad.
Los biberones Farline son aptos para leche materna, leche de fórmula y para la introducción progresiva de líquidos en cada etapa del crecimiento. Incorporan tapa antiderrame de silicona y tapa protectora para la tetina, lo que facilita su transporte y uso fuera de casa. Están fabricados sin BPA, ftalatos ni látex, cumpliendo la norma EN 14350, y cuentan con dos tamaños. Así, en función de las necesidades de tu bebé, puedes elegir entre el Biberón de 150 ml de flujo lento y el Biberón de 360 ml de flujo rápido .
Las tetinas Farline, por su parte, están fabricadas con silicona de grado alimentario y con válvula anticólicos para evitar la ingesta de burbujas de aire. Están disponibles en flujos lento, medio y rápido, y son compatibles con los sacaleches Aposán, tanto con el Extractor eléctrico como con el Extractor manual, y el Calienta Biberones Farline.
Si el bebé está en periodo de dentición, es posible que tomar el biberón irrite sus encías. Para aliviar estas molestias, puedes recurrir a mordedores o geles para calmar las encías.
¿Cuál es la temperatura ideal para el biberón?
Esta es una de las principales dudas a la hora de calentar el biberón. La respuesta es sencilla: la leche debe estar tibia, a una temperatura similar a la corporal.
La forma más fiable de comprobarlo es la tradicional: verter unas gotas en la parte interna de la muñeca. Si apenas se nota, está lista. Se debe evitar servirla muy caliente, porque podría quemar al bebé.
¿Se puede recalentar la leche del bebé?
Si el biberón se ha preparado con antelación y se ha conservado correctamente en la nevera (a menos de 5 ºC), se puede calentar antes de la toma. Para ello, lo ideal es sumergirlo en un recipiente con agua caliente o usar un calientabiberones.
¿Es obligatorio calentar la leche del biberón?
No siempre es necesario calentar el biberón y muchos bebés aceptan la leche a temperatura ambiente sin problema. En esos casos, puede prepararse el biberón con agua fría y ofrecerlo directamente. Si el bebé lo prefiere templado, entonces sí habrá que calentarlo siguiendo las pautas de seguridad.
¿Puedo calentar el biberón en el microondas?
Calentar el biberón en el microondas no es una opción segura y está desaconsejado. Esto se debe a que el microondas no reparte el calor de forma uniforme y crea zonas muy calientes que pueden quemar la boca del bebé aunque por fuera parezca templado.
Si se quiere simplificar, existen otras alternativas: calentar agua caliente en un recipiente y sumergir el biberón o usar un calientabiberones, pero siempre respetando los tiempos para evitar la proliferación bacteriana.
¿Y si la leche es materna?
En el caso de leche extraída, la recomendación también es evitar el microondas. Lo adecuado para calentar el biberón de leche materna es sumergir el recipiente en agua caliente, calentarlo al baño maría o en el calientabiberones, nunca en el microondas.
Si has elegido la lactancia materna o la lactancia mixta, no te pierdas estos consejos para extraer y conservar la leche materna.
Consejos extra para preparar el biberón correctamente
- Lávate siempre las manos antes de empezar.
- Usa utensilios limpios o esterilizados, especialmente en los primeros meses de vida del bebé.
- Prepara el biberón justo antes de cada toma y dáselo de inmediato.
- Si vas a preparar varios biberones para el día, refrigéralos enseguida y consúmelos en 24 horas como máximo.
- Cuando tengas previsto dar el biberón fuera de casa, no olvides preparar la bolsa del bebé con los básicos imprescindibles, como el Dosificador de leche y las Toallitas higiénicas. Si el bebé va a pasar el día en la guardería, te recomendamos ‘Mis básicos para la guardería’ de Farline, con todo lo que pueda necesitar para pasar un día estupendo.
- En los viajes, transporta los biberones fríos con bolsas térmicas y hielo, o lleva el agua y el polvo por separado.
- Nunca guardes restos de biberón para la siguiente toma.
- Comprueba siempre la temperatura antes de ofrecer el biberón.
- En el caso de que el bebé rechace las tomas o notes que le sienta mal la leche, consulta con el pediatra para que valore si sufre intolerancia a la lactosa u otro trastorno que afecte a su alimentación.
Acude a tu farmacia y pregunta por los productos de Farline. Tu farmacéutico de confianza siempre está disponible para ofrecerte consejo y recomendarte lo más adecuado, según tus necesidades.
Fuente:
- Consejos para preparar el biberón con seguridad. Agencia Catalana de Seguridad Alimentaria.
- Cómo preparar biberones. Comunidad de Madrid.
- Preparando el biberón. Asociación Española de Pediatría.
- Elaboración propia.
Validado por Blanca Mateos,
Farmacéutica