Ahora que los baños son más frecuentes, también lo son los casos y consultas sobre las otitis o infecciones del canal auditivo; el temido dolor de oídos que afecta a tantos niños… Una de las causas principales es la humedad excesiva tras el baño, y que favorece la proliferación de bacterias en el canal auditivo.
Las medidas preventivas contra la otitis son sencillas, y aunque no van a garantizar al 100% que no aparezcan:
- Evitar introducir bastoncillos de oídos, que podrían causar pequeños “arañazos” en el canal auditivo, empeorando la situación en caso de infección. Además, la cera va es una barrera natural que impide que los gérmenes se asientes.
- Si puedes elegir, el agua de mar causa menos otitis que la de la piscina.
- Evita la entrada de agua en el canal auditivo, con tapones especiales.
- Debemos distinguir, pues existen tapones de oídos para distintos fines, principalmente:
- Para reducir el ruido ambiental, bien sea en el ambiente laboral, o para poder conciliar el sueño. Estos son normalmente de poliuretano o espuma.
- Para proteger al oído del agua: tapones de cera o silicona moldeables, que se adaptan al oído. Aunque no impiden totalmente la entrada de agua, si la reducen considerablemente. Es importante retirarlos una vez fuera del agua, y mantenerlo limpios y bien conservados.
Pregunta a tu farmacéutico cual es la mejor opción para tus necesidades.