Si quieres tener una piel sana y bonita, hay un primer paso que no te puedes saltar: la limpieza. Porque una piel sana, necesita mucho más que nutrición. La limpieza va a permitir:
- Retirar las impurezas que se acumulan en la piel
- Oxigenarla
- Mejorar su luminosidad
- Evitar el envejecimiento prematuro
- Mejorar la penetración de otros activos que apliquemos posteriormente.
¿Y cuál es el mejor producto para la limpieza facial? Sin duda alguna…. aquel que vayas a emplear de forma habitual. Por eso, elige aquel que resulte asequible a tu bolsillo, y con el que tu piel se sienta cómoda y confortable. A parte de esto, cada producto puede tener una indicación o momento idóneo para emplearlo. Así,
- Las toallitas desmaquillantes, son ideales para retirar una primera capa de maquillaje, o cuando estamos fuera de casa, como en el gimnasio o de viaje, o si nos da mucha pereza emplear cualquier otro producto.
- Agua micelar, desmaquilla y limpia en profundidad ojos y rostro, además no necesita aclarado. Pueden usarlo todo tipo de pieles, incluso las más delicadas. Aunque después de su aplicación puedes aclarar tu cara, no es necesario…
- Gel limpiador, además de limpiar, realiza un ligero peeling químico por lo componentes que tiene, purifica y tiene efecto anti-puntos negros. Sería perfecto si te gusta sentir la limpieza del aclarado el agua sobre tu piel. Y en función de la frecuencia de uso, lo pueden usar tanto pieles más grasas (a diario, mañana y noche), o pieles normales, incluso secas ( 2-3 veces en semana)
