Seguro que en alguna ocasión has visto, incluso en el mostrador de
la farmacia, estos aparatos con formas y colores diversos y que
desprenden vapor… ¿pero sabes qué son los humidificadores y cuáles son
los beneficios que aportan a nuestra salud?
Quizás pienses que está destinado únicamente al cuidado del
ambiente de las habitaciones de los bebés. Es cierto que en el caso de
los bebés, cuyo sistema inmunitario está en desarrollo, y que no
tienen la capacidad de expectorar o sonarse como los adultos, es de
especial interés mantener los niveles adecuados de temperatura y
humedad. Pero tiene muchos otros beneficios para toda la familia.
El uso de un humidificador en casa nos va ayudar en muchos
sentidos, ya que:
- Evita la irritación e inflamación que el aire seco puede causar
en las vías respiratorias altas.
- Evita también la sequedad de la piel, lo cual también es bueno
para los niños y personas con dermatitis atópica, ezcemas, etc. Y en
general, para mejorar la hidratación cutánea de todos.
- Mejora la sequedad ocular, ya que la humedad ambiental baja hace
que la lágrima se evapore más y se resequen los ojos, con la
consiguiente molestia ocular.
- Evita en general la sequedad de mucosas. Esto puede ayudar a
evitar ronquidos, por ejemplo, y mejorar la respiración en general.
- Puede mejorar los síntomas en casos de resfriado y otras
patologías respiratorias como asma, alergias, laringitis, etc.
Por tanto, si en tu hogar la humedad relativa es baja,
especialmente en invierno, con el uso de calefacciones, unido al hecho
de que en invierno se ventila y renueva menos el aire de las
estancias, lo mejor es que consultes a tu farmacéutico, quien te
recomendará no sólo el mejor
Humidificador
, sino también cuándo y cómo emplearlo para sacarle el mejor partido.